La comunicación asertiva es clave para expresar lo que opinamos y sentimos así como dejar que los demás lo hagan. Significa relacionarnos de un modo respetuoso, observando nuestros derechos y responsabilidades y los de los demás.
Cómo nos comunicamos puede influir mucho en nuestro bienestar y autoestima. Cada vez que no nos atrevemos a compartir nuestras opiniones y deseos, posiblemente sintamos resignación, culpa e incluso enfado hacia nosotros mismos. Veamos qué nos suele impedir comunicarnos asertivamente y cuáles son las claves de la comunicación asertiva.
Razones para no ser asertivo
No comunicarnos de forma asertiva puede tener varias razones.
Si tendemos a una comunicación sumisa se puede deber a una falta de autoconfianza y seguridad en nosotros mismos. Tal vez tenemos miedo a qué pensarán de nosotros. Creemos que nuestra opinión no importa o que las opiniones de otros son más válidas.
Es posible que temamos hacer daño a otros o que ya no nos quieran si expresamos lo que sentimos y pensamos. Tal vez consideramos que los deseos de los demás son más importantes. Es posible que tengamos la creencia de que es mejor evitar los conflictos y no quejarse. O que siempre hay que ayudar a los demás si tienen un problema.
Si oscilamos más bien a una comunicación agresiva se puede deber a una falta de empatía y habilidades sociales. Tal vez nos creamos mejores que los demás. Sentimos la necesidad de imponer nuestro criterio. La comunicación agresiva también puede ser una fachada para tapar las inseguridades y debilidades. Un mecanismo de autodefensa para que los demás no descubran nuestras flaquezas o nuestros miedos.
En qué consiste la comunicación asertiva
Si queremos desarrollar relaciones personales sanas, la comunicación asertiva es clave. Comunicarnos asertivamente significa expresar nuestros sentimientos y opiniones con respeto, en el momento justo. La asertividad es el punto medio entre una actitud agresiva y una actitud pasiva o sumisa.
Claves para una comunicación asertiva
Las relaciones sanas requieren expresar nuestros sentimientos y opiniones y dejar que los demás lo hagan, observando unas normas de comportamiento.
1. Sé honesto
Disimular lo que sentimos a la larga nos perjudica. Comunicar asertivamente requiere admitir qué sentimos, saber qué pensamos y transmitirlo a los que deban conocerlo.
2. Muestra respeto
Sin embargo, la comunicación asertiva no significa soltar todo lo que nos pase por la mente sin filtro. No se trata de ser sinceros a costa de los sentimientos de los demás con la excusa de: ‘Yo siempre digo lo que pienso’.
Comunicarse asertivamente significa respetar los sentimientos de los demás. Es decir, no ofender innecesariamente así como aceptar que hay otros puntos de vista. Igual que queremos que respeten nuestros sentimientos y opiniones, hagamos lo mismo con los demás.
3. Escucha activamente
Practicar la comunicación asertiva no solo significa expresar nuestras opiniones sino también dejar a los demás que lo hagan. Presta atención plena a lo que quiere expresar el otro. La escucha activa es otra forma de mostrar respeto por los sentimientos y opiniones de los demás.
4. Céntrate en la conducta o situación concreta
Cuando quieras expresar tu descontento o desacuerdo, céntrate en el momento concreto o el comportamiento concreto que no te ha parecido correcto. Es fácil caer en la trampa de usar comentarios como ‘eres un desastre’, ‘eres un maleducado’ etc. Sin embargo, la conversación será más productiva si no atacas a la persona y sus características. Mejor expresa cómo te ha hecho sentir la conducta o situación que te ha molestado.
5. El significado de la comunicación es la respuesta
Cada uno tenemos nuestro modelo del mundo. Es decir que tenemos unas creencias y experiencias que dan forma a lo que percibimos del mundo. Por eso puede ser que el otro no entienda exactamente del mismo modo lo que pretendes comunicar. De ahí que surgen los malentendidos en las conversaciones.
Por eso, cuando quieres transmitir algo, procura pedir que el otro te confirme qué ha entendido. Su respuesta te sirve de comprobación sobre si realmente has conseguido expresar lo que pretendías.
6. Emplea la inteligencia emocional
La comunicación asertiva requiere saber qué sentimos y saber gestionar nuestras emociones. Solo de este modo podemos expresar lo que sentimos y hacerlo de forma equilibrada. Es decir que así evitamos una reacción agresiva por estar enfadados o frustrados. O evitamos directamente no comunicarnos por miedo.
La comunicación asertiva también requiere de autoconfianza para atrevernos a expresarnos. Asimismo hace falta empatía para elegir el momento oportuno de comunicar ciertas cosas y la manera oportuna de hacerlo.
7. Elige el momento oportuno
Comunicar asertivamente asimismo significa elegir el momento adecuado para transmitir nuestros sentimientos y opiniones. Requiere emplear la inteligencia emocional para detectar cómo están los ánimos.
Pongamos que te ha molestado mucho el comportamiento de un compañero de trabajo. Hacérselo saber en caliente, mientras estés enfadado, no es el momento oportuno. Hacerlo delante de testigos puede no ser tampoco la mejor idea. Es más aconsejable esperar a calmarte y entonces decirle que te gustaría hablar un momento en privado con él o ella.
8. Conoce tus derechos y responsabilidades asertivos
Para comunicarnos asertivamente debemos conocer no solo nuestros derechos sino también nuestras responsabilidades. Se trata de observar unas normas básicas de buena educación, de respeto y de tolerancia.
Necesidades y deseos
Tienes el derecho de pedir lo que necesitas y quieres. Salvo que debas reclamar algo que te corresponda por un acuerdo o por ley y que te esté siendo negado, no deberías exigir. Acepta que los demás se pueden oponer a tus demandas. Del mismo modo tienes la responsabilidad de dejar que los demás expresen sus deseos y necesidades. Eso no quiere decir que tengas que estar de acuerdo con todo o aceptar todas sus peticiones.
Además, tienes el derecho a no tener que adivinar los deseos y necesidades de otros, y que ellos se sientan ofendidos porque no sepas leerles la mente. Ellos tienen el derecho asertivo de manifestar lo que necesitan y quieren.
Opiniones y sentimientos
Tienes derecho a tener tus opiniones y sentimientos así como de expresarlos. Pero tienes la responsabilidad de hacerlo de manera respetuosa, sin agredir verbalmente o humillar a los demás.
Los demás tienen derecho a estar en desacuerdo, pero no a decirte qué deberías pensar o sentir. Tampoco tienen derecho a faltarte al respeto.
Dignidad
Tienes derecho a ser tratado con dignidad y respeto. También tienes la responsabilidad de tratar a los demás respetuosamente.
Tienes el derecho a ser escuchado y tomado en serio. Es decir, poder expresar tus opiniones, necesidades e inquietudes sin ser descalificado o ser tratado con hostilidad.
Por supuesto, también tienes la responsabilidad de escuchar y tomar en serio a los demás sin tratarlos de forma descalificativa u hostil.
Bienestar
Tienes derecho a decidir qué es mejor para ti. Es decir que tienes la libertad de decidir en tu vida sin intromisiones ni chantajes emocionales.
Por otro lado, deberás permitir que los demás también decidan qué es mejor para ellos.
Aun aplicando el principio de respeto, podría ser que tu bienestar se contrapusiera en algún momento al bienestar legítimo de otros. Si fuera el caso deberías ver si es posible llegar a un acuerdo que respete los derechos de ambas partes o que compense a la parte afectada.
Decir ‘no’
Tienes derecho a decir ‘no’ cuando no quieras o puedas atender una demanda. Aunque nos gustaría ayudar a los demás, no siempre será posible. Por diferentes motivos puede que no te sientas cómodo con ello o que no encaje en tus planes por ejemplo.
No deberías sentirte mal si dices‘no’ ni dejarte chantajear. Como decía en el apartado anterior tienes el derecho a decidir qué es lo mejor para ti.
Ello conlleva la responsabilidad de permitir también que los demás te digan que ‘no’.
Cometer errores
Tienes derecho a cometer errores. Nadie es perfecto. Por eso acepta tus vulnerabilidades y limitaciones. No sientas vergüenza o culpa por ellas. La culpa o vergüenza solo están justificadas cuando nuestros actos han atentado contra el bienestar o los derechos de otros. Pero no lo están por aspirar al ideal inalcanzable de la perfección.
Asimismo deberías aceptar las debilidades y limitaciones de los demás sin ofenderlos o ridiculizarlos.
Además, acepta las consecuencias de las decisiones que tomas y los posibles errores que cometas. Tienes la responsabilidad de aceptar que todos cometemos errores. Lo que deberíamos hacer es procurar aprender de ellos. Si nuestros errores han perjudicado a otros deberíamos buscar algún tipo de compensación para ellos.
Cambiar de idea
Tenemos el derecho de cambiar de opinión. Vamos adquiriendo continuamente conocimientos y experiencias. Por eso nuestro punto de vista y nuestras prioridades pueden cambiar. Eso significa que podemos cambiar de idea sobre algo.
Integridad física y mental
Por último todos tenemos derecho a protegernos. No debemos aceptar ataques verbales, maltrato físico o psicológico. Se trate de una ofensa verbal fruto de un enfado, de acoso laboral o escolar, o de maltrato sistemático, tienes derecho a defenderte.
Si alguien te hace daño, aunque no sea intencionadamente, tienes derecho a tomar medidas para protegerte.
Del mismo modo tienes la responsabilidad de no ofender o maltratar a otros ni de comprometer su integridad. Debemos respetar los derechos humanos básicos, procurando no hacer daño a los demás o, si es para defendernos, intentar causar el menor daño posible.
9. Técnicas de asertividad y entrenamiento
Finalmente, la comunicación asertiva requiere aprender técnicas y practicarlas. Por un lado, entrenar nuestra inteligencia emocional, es decir gestionar nuestras emociones, practicar la empatía y cuidar nuestra autoestima y autoconfianza son claves.
Por otro lado, es esencial entrenar nuestras habilidades comunicativas. Significa aprender a expresarnos de forma constructiva, manejar conversaciones complicadas, discusiones, quejas y conflictos.
¿Practicas la comunicación asertiva?
Una vez vistas las claves ¿crees que te comunicas de forma asertiva? ¿Hay algún aspecto que te suele resultar más difícil? ¿Qué punto crees que puedes mejorar?
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2 respuestas
Excelente . Hay bastante claridad y argumentos . Gracias
Muchas gracias Esmeralda. Me alegra que te haya gustado.