Creo que todos nos emocionamos cuando pensamos en las vacaciones. Incluso los preparativos ya pueden ponerte de buen humor. La cuestión es si luego tus vacaciones te sirven para desconectar del trabajo y descansar como deberían. Por eso veamos unas claves de cómo relajarse bien durante las vacaciones.
Antes de las vacaciones
Disfrutar de unas vacaciones relajantes empieza antes de las mismas. Si tienes todo bien preparado, te evitas estrés innecesario y te podrás concentrar en relajarte bien. Veamos unos puntos a tener en cuenta y a preparar previamente.
1. Decide el objetivo de tus vacaciones
Primero, considera qué tipo de vacaciones buscas para relajarte bien. Define qué significa relajación para ti. ¿Quieres mimarte y relajarte mucho? ¿Quieres salir de tu rutina? ¿Buscas conocer y explorar nuevos sitios? ¿Quieres divertirte? ¿Te apetece más naturaleza o ciudad? ¿Te gusta más la playa o la montaña?
Con eso puedes concretar el lugar y el tipo de tus vacaciones así como actividades a incluir.
2. Prepara la logística
Una vez reservados medios de transporte y alojamiento, organiza la documentación de viaje. ¿Necesitas llevar pasaporte? ¿Necesitas visado o vacunas? Si has organizado tu viaje con una agencia te proporcionarán un itinerario con los detalles. Si no, yo suelo preparar una hoja de cálculo con los datos de los vuelos, alojamientos, excursiones y sitios que visitar. La tengo guardada en el Google Drive y además me la llevo en papel.
Si tienes pensado hacer alguna excursión o visita, sugiero que compruebas las fechas disponibles e incluso reserves por adelantado. Te salva de la decepción de no poder hacerlas por estar completas o de tener que perder tiempo en colas interminables.
Para evitar estrés, no te llenes el itinerario de viaje con demasiadas actividades. Además calcula tiempo de sobra para los desplazamientos. Querrás tener tiempo para pararte en algún mirador o punto de interés que descubras por el camino.
Luego piensa qué tipo de ropa o material necesitarás en función del tiempo y las actividades que vayas a hacer. Conviene elegir ropa y calzado que combinen entre sí, para no cargar con demasiado equipaje.
3. Deja organizado tu trabajo
Para relajarte de verdad en tus vacaciones, es imprescindible que consigas desconectar del trabajo. Para ello prepara, organiza y delega tus tareas antes de tus vacaciones. También informa a quien sea necesario de tu ausencia. Además, activa un mensaje de fuera de oficina en tu correo indicando los interlocutores alternativos.
Para empezar las vacaciones de forma más relajada, también es buena idea no salir de viaje enseguida. Es decir, tómate uno o dos días libres antes para los últimos preparativos.
4. Deja organizado tu hogar
Luego piensa en otras cosas a dejar preparadas y organizadas en tu hogar. ¿Tienes alarma en casa y debes avisar a la empresa de seguridad? ¿No puedes llevarte tu mascota y necesitas buscarle un lugar? El día que te marchas, desconecta agua, gas, luz y lo que haga falta.
Tanto para los preparativos del propio viaje como para organizar tu trabajo y cosas del hogar, puede ser una buena idea hacerte una lista de tareas.
Durante las vacaciones
Ha llegado el momento de tus vacaciones. Para disfrutarlas y relajarse bien en vacaciones, veamos algunos consejos e ideas.
1. Desconecta del mundo digital
Hoy día pasamos muchas horas delante de la pantalla del ordenador, móvil, televisión etc. Para relajarse bien en vacaciones, sugiero que reduzcas la exposición al mínimo.
Silencia las notificaciones de las aplicaciones de tu móvil. Concéntrate más en disfrutar el momento que en capturar todo en tu móvil para compartirlo en redes sociales.
Por ejemplo, empieza la mañana sin que lo primero que hagas sea mirar tu móvil. También disfruta de las comidas con el móvil fuera de la vista.
Si te cuesta despegarte de tu móvil, considera fijar alguna hora al día para consultarlo y ponerte al día de las redes sociales.
2. Tómatelo con calma
Sobre todo si llevas un ritmo de vida muy activo y ocupado, aprovecha tus vacaciones para bajar de revoluciones. Está bien no hacer nada durante ratos. Así que no te llenes el día de tantas actividades que vas corriendo de un lado a otro. Dale preferencia a la calidad de tus experiencias antes que a la cantidad.
3. Relaja tus expectativas
Cuantas más expectativas tenemos, más probabilidades de sentirnos defraudados. Puede que no te dé tiempo a hacer todo lo que tenías pensado. Tal vez tu destino, tu alojamiento o alguna actividad no cumpla todas tus expectativas. Quizá en tu destino de viaje no se hagan las cosas cómo estás acostumbrado en casa.
Pero esa es precisamente la gracia de viajar. Conocer sitios distintos, personas, culturas, tradiciones y maneras de hacer diferentes. Por eso es mejor viajar con la mente abierta. Déjate llevar y acepta las cosas como son. Relájate y disfruta.
4. Cuida tu alimentación e hidratación
Durante las vacaciones muchos salimos de la rutina en cuanto a la alimentación. Comemos más en restaurantes pidiendo lo que más nos gusta. Al estar por allí de excursiones, quizá no nos hidratamos como lo haríamos en casa.
Si quieres que tus vacaciones sirvan para mejorar tu bienestar, procura cuidar tu alimentación. Come mucha fruta y verdura. Varía entre carne, pescado y marisco. Disfruta de la comida local. Y, sobre todo en las vacaciones de verano, siempre lleva suficiente agua encima.
5. Duerme bien
Relajarse bien en vacaciones, por supuesto, también significa dormir las horas suficientes y disfrutar de un sueño de calidad. Por eso puede ser buena idea llevarte antifaz y tapones para los oídos si eres sensible a la luz y los ruidos.
Si no te gusta la almohada en tu alojamiento, pregunta si tienen otros tipos. Hay gente que incluso se lleva su almohada de viaje.
Si madrugas para excursiones y luego trasnochas con cenas o salidas tardías, resérvate tiempo para una siesta después de comer. O al menos pasa un rato por la tarde sin hacer nada.
6. Sumérgete en la naturaleza
La conexión con la naturaleza es beneficiosa para nuestro bienestar y salud. Pero muchos pasamos a lo largo del año muchas horas encerrados en casa o en la oficina.
Por eso las vacaciones son una oportunidad excelente para disfrutar de estar al aire libre y de la naturaleza. No hay nada mejor para relajarse bien en vacaciones que recuperar la conexión con la naturaleza.
Ideas para disfrutar de la naturaleza
- Busca rutas panorámicas para disfrutar de las vistas.
- Haz senderismo o rutas en bicicleta.
- Pasea por la playa o por zonas verdes de tu lugar de vacaciones.
- Báñate en el mar, en un lago o río.
- Apúntate a una excursión en barco, de snorkel o de buceo.
- Haz deportes acuáticos.
- Disfruta de la salida o puesta del sol y de las estrellas.
- Toma el sol.
- Disfruta de un picnic en un parque, bosque, monte o en la playa.
- Anda descalza.
7. Disfruta de la belleza
Además de disfrutar de la belleza de la naturaleza, tómate tiempo para apreciar la arquitectura y el arte.
- Apúntate a una visita guiada.
- Visita los sitios históricos del lugar.
- Piérdete por las calles a ver qué descubres.
- Visita museos y exposiciones.
- Asiste a un concierto o visita un local con música en directo.
- Disfruta de los espectáculos callejeros.
8. Disfruta otras actividades relajantes
- Lee un libro o una revista.
- Juega a las cartas o a juegos de mesa
- Siéntate en una terraza a ver la vida pasar.
- Escribe postales a tus seres queridos.
- Haz estiramientos por la mañana y por la noche.
- Charla con la gente local para conocer más sobre su cultura y tal vez alguna recomendación especial.
- Visita un spa o resérvate un masaje.
- Escribe en tu diario.
- Dibuja, pinta o haz manualidades.
9. Presta atención plena
Hagas lo que hagas en tus vacaciones, presta atención al momento presente. Absorbe las vistas, los sonidos, los olores y otras sensaciones. Disfruta de ratos tranquilos sin hacer nada más que estar aquí y ahora.
Si sueles meditar, no te saltes la buena costumbre durante tus vacaciones. Incluso aprovecha para meditar al aire libre.
Después de las vacaciones
Por último, para que te dure la relajación y evitar el síndrome postvacacional, tómate la vuelta con tranquilidad. Si dejaste tu trabajo organizado y delegado, la reincorporación se te debería hacer menos dura. Pero hay cosas que puedas hacer para volver al trabajo sin estrés.
Además, recupera tu rutina de hábitos saludables. Pero procura no recaer en una rutina que tal vez te estrese o te aburre. Organízate planes de ocio que te ayuden a hacer perdurar esa sensación de vacaciones, disfrute y relajación.
¿Consigues relajarte bien en vacaciones?
¿Cómo suelen ser tus vacaciones? ¿Consigues desconectar bien del trabajo? ¿Te resultan realmente relajantes? ¿Cuáles son tus actividades favoritas para relajarte en vacaciones y disfrutar?
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