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¿Con qué actitud vas por la vida? ¿Tomas la vida por los cuernos, perseveras en tus objetivos y luchas por tus sueños? ¿Te sientes contento con tu vida e intentas ver el lado positivo de las cosas? ¿Intentas no dejar que otros influyan sobre tu estado de ánimo?
O acaso ¿ves a otras personas y te preguntas cómo pueden parecer tan contentos? ¿Cómo parecen conseguir lo que se proponen? ¿Cómo tienen tanta suerte? O ¿cómo no se parecen cabrear por nada?
Pues resulta que todo se puede resumir en una palabra: actitud.
Y te puedo asegurar que este post lo escribo tanto para ti como para mí porque lo que te voy a contar, me lo he tenido que aplicar yo misma mientras escribía esto. No siempre podemos estar en nuestro mejor momento y si se suman situaciones estresantes y que te sientes desbordado, pues ni te cuento. Entonces es necesario revisar nuestra actitud y reunir fuerza de voluntad.
¿Cómo mejorar nuestra actitud?
Si queremos trabajar en nuestra actitud creo que debemos dar cuatro pasos:
- Tomar consciencia de que nuestra actitud es mejorable.
- Reflexionar y analizar el trasfondo.
- Decidir los aspectos que queremos mejorar.
- Actuar, es decir poner en práctica lo decidido.
Pues resulta que todos podemos decidir cómo sentirnos y actuar en cualquier situación. Lo que pasa es que no siempre es fácil. Porque la costumbre y los hábitos adquiridos nos incitan a reaccionar y comportarnos de la manera que tenemos interiorizada.
La #actitud es el pincel que colorea cada situación. James W. Moore Share on X
Tomar consciencia
El primer paso consiste en darnos cuenta de que una actitud negativa, derrotista o pasiva no nos está ayudando o incluso está agravando lo que nos pasa.
Pongamos que tienes un accidente de coche. Puedes pillarte un cabreo monumental. O puedes ponerte en modo víctima preguntándote por qué te tiene que pasar a ti. Pero también te puedes dar cuenta de que ninguna de estas actitudes te servirá para nada más que para sentirte rabioso o triste. Así que puedes simplemente aceptar que ha pasado y tomar las acciones necesarias como rellenar el parte del seguro o llamar a la policía si hace falta.
O tal vez estés desbordado de trabajo y parecen entrar más tareas de las que consigues realizar. Puedes estresarte y bloquearte mentalmente. También puedes cabrearte con tu jefe o compañeros. O puedes llorarle tus penas a cualquiera que te quiera escuchar (o no). Pero también puedes elegir actuar de forma más productiva.
Como puedes ver con estos ejemplos suele haber varias opciones de cómo sentirte y actuar.
Y con práctica podemos tomar consciencia de lo que nos pasa y actuar de forma más activa y fructífera. Porque la vida en realidad está llena de decisiones, grandes y pequeñas. Por tanto, igual que decidimos qué desayunar o qué ropa ponernos, podemos decidir cómo enfrentarnos a la vida y cómo sentirnos en diferentes situaciones.
La #vida son #decisiones. Tú decides con qué #actitud enfrentarte a ella Share on X
Reflexiona y analiza el trasfondo
Una vez te has concienciado de que tu actitud puede ser mejorable, reflexiona qué te pasa. ¿Estás descontento con algún aspecto de tu vida o por las expectativas que tienes? ¿Te sientes estresado? ¿Estás agobiado? ¿Estás agotado? ¿Te sientes enfadado o triste?
Para poder mejorar tu actitud es necesario saber qué te pasa realmente, cómo te sientes y por qué.
Decide los aspectos que quieres mejorar
El siguiente paso es tomar la determinación de hacer cambios en nuestra vida y nuestra forma de encarar las cosas. Ello dependerá por supuesto de lo que te pasa.
Si te sientes descontento con algo, será cuestión de pensar cómo puedes mejorar tu situación.
Si estás agotado necesitarás buscar tiempo para descansar de forma activa y consciente. Eso puede ser desde dormir las horas necesarias, alimentarte correctamente para darle los nutrientes necesarios a tu cuerpo hasta tomarte tiempo para paseos relajantes, meditar, hacer yoga y aligerar tu agenda de compromisos por ejemplo.
Si te sientes estresado o agobiado la solución pasará posiblemente por analizar lo que te estresa, recordar tus prioridades y objetivos y descargarte de obligaciones.
Pero más allá de pensar en qué acciones podemos emprender, nuestra actitud también depende en gran parte de cómo vemos el mundo y nuestra vida.
Tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes, estás en lo cierto. #HenryFord Share on X
Actúa
Si queremos mejorar ciertos aspectos de nuestra vida o de nosotros mismos, deberemos hacer cambios en nuestras costumbres a la hora de actuar y pensar.
Pero es posible que el hecho de habernos enfrentado de cierta manera a las situaciones hasta el momento se debe a que no conocemos otra forma de hacer las cosas. Puede ser por tanto necesario adquirir nuevas técnicas y habilidades. Veamos alguna técnica.
Vigila tu diálogo interno
El primer paso es darnos cuenta de qué mensajes nos estamos enviando a nosotros mismos. ¿Nos estamos tratando con amabilidad, animando y motivándonos? ¿O por el contrario nos estamos diciendo que no nos apetece? ¿Que estamos hartos de nuestro trabajo o nuestros compañeros o de lo que sea? ¿Tal vez sintamos que ciertas cosas o personas nos saquen de quicio? ¿O les estemos echando la culpa de lo que nos pasa o de cómo nos sentimos?
Los pensamientos negativos nos pueden llevar a sentirnos abatidos y agotados. Por tanto, aprender a ver las cosas buenas que nos pasan y dar las gracias por ellas, nos ayudará a reducir los pensamientos desmotivadores e incluso pesimistas.
El bien y el mal no están en las cosas, sino en nuestra #actitud hacia ellas. #Epicteto Share on X
Cuidado con las generalizaciones
Una herramienta del coaching y PNL invita a detectar las generalizaciones que hacemos y nos pueden estar influyendo o limitando en nuestro comportamiento.
Así que reflexiona sobre tu forma de expresarte tanto a la hora de hablar con otros como cuando te comunicas contigo mismo. ¿Tienes tendencia a usar palabras como “siempre”, “jamás”, “nunca”, “la gente”, “todo el mundo”, “nadie” etc. haciendo afirmaciones como “la gente me saca de quicio”, “nadie me ayuda”, “siempre me caen todos los marrones”, “ por qué siempre me tiene que pasar a mí”?
Te sugiero que aprendas a detectar estas generalizaciones y las analices. Veamos dos de los ejemplos y posibles preguntas que te podrías plantear:
- Afirmación: “La gente me saca de quicio.”
- Preguntas a hacerte: ¿Quién es exactamente la gente? ¿Quién te saca de quicio realmente? ¿Por qué te sientes de esta forma? ¿Por qué les concedes a esta o estas personas tanto poder sobre tus sentimientos?
- Afirmación: “Siempre me caen todos los marrones”
- Preguntas a hacerte: ¿Realmente siempre? ¿Todos los marrones? ¿Por qué consideras un marrón la tarea encomendada? ¿No forma parte de tus responsabilidades? ¿No tienes claro el objetivo y beneficio de esa tarea?
Darnos cuenta de las generalizaciones e intentar sustituirlos por pensamientos o comentarios menos totalitarios no es tarea fácil y nos llevará tiempo. Pero ser más consciente de que las empleas será el primer paso en la buena dirección hacia una mejor actitud.
El #sentido de las cosas no está en las cosas mismas, sino en nuestra #actitud hacia ellas. Antoine de #SaintExupéry Share on X
Escucha las señales de tu cuerpo
Hoy en día parece que estamos tan liados que hemos aprendido a ignorar lo que nos quiere contar nuestro cuerpo. Cómo dice la consultora y coach alemana Elke Nürnberger en su libro: Explícale a un niño pequeño por qué llevas horas trabajando sin poder ir al baño, descansar o comer. ¿Te suena de algo? Te puedo asegurar que a mí me ha pasado. Pero ¿acaso no parece absurdo?
Es más, si no prestamos atención a las necesidades básicas de nuestro cuerpo y no nos tomamos tiempo para descansar en realidad seremos menos productivos y efectivos en lo que hagamos. Por ello, te sugiero que aprendas a reconectar con tu cuerpo y lo que te quiere transmitir. Así te darás cuenta cuando te pide un descanso, te pide comer o estirar las piernas por ejemplo.
Presta atención a tu estado de ánimo
Como decía al principio no siempre podemos estar al cien por cien, felices y contentos. Es normal sentirse triste o enfadado a veces.
La cuestión es reconocer y aceptar esas emociones para después buscar un modo productivo de canalizarlos. Es decir que no se trata de sumarnos en un estado de autocompasión o enfado con el mundo sino reflexionar qué podemos hacer para mejorar nuestra situación y con ello nuestro estado de ánimo. Recuerda que la vida son decisiones y podemos decidir si queremos ir por la vida con una actitud negativa y derrotista o preferimos tomarla por los cuernos.
Adquiere hábitos saludables
Para tener una actitud positiva ante la vida debemos tratarnos con cariño y respeto y cuidarnos. Alimentarnos de forma saludable, tomarnos descansos regulares y hacer algo de actividad física nos ayudarán. Está demostrado que la actividad física libera endorfinas, lo que mejorará nuestro estado de ánimo. Cuidarnos al fin y al cabo es demostrarnos amor propio.
Entre los hábitos saludables también incluyo buscar el equilibrio entre trabajo y vida personal. Si tienes tendencia a seguir dándole vueltas al trabajo en tu tiempo libre, te recomiendo aprender trucos para desconectar. De otro modo, las preocupaciones por el trabajo y que puedas tener en tu vida privada formarán una bola de nieve enorme que te pueden bloquear mentalmente hasta eclosionar en un derrumbe emocional o arrebato de ira.
Vive el aquí y ahora
El Mindfulness nos enseña a vivir de forma consciente el presente. Si estás constantemente dando vueltas a lo que te ha pasado, que te ha enfadado o entristecido, y lo que te podría pasar, que otros puedan estar pensando sobre ti etc. será difícil tener una buena actitud y echarle ganas a lo que pretendes hacer. Por tanto, te recomiendo tomarte las cosas paso a paso y enfrentarte a los problemas cuando lleguen, si es que llegan. Preocuparte por lo que no ha pasado aún sólo te ocupará un espacio valioso en tu mente y te impedirá tener pensamientos productivos y útiles.
La #vida es un #viaje, no un #destino. #RalphWEmerson #CuestiónDeActitud Share on X
Resumiendo
Nuestra actitud ante la vida determinará cómo nos enfrentemos a las situaciones y lo que consigamos. Depende de ti decidir cómo sentirte en relación a lo que te ocurre. Es más depende de ti no sólo esperar que las cosas ocurran sino hacerlas suceder. Cuestión de actitud.
Depende de ti no sólo esperar que las cosas pasen sino hacerlas suceder #Actitud Share on X
Para terminar te dejo un vídeo genial de Víctor Küppers sobre la actitud:
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20 respuestas
Dorit como siempre me encantan tus artículos, pero este en concreto me toca más mi fibra sensible porque me identifico con algunos puntos pero cuesta mucho cambiar.
Gracias por compartirlo y un cariñoso saludo.
Muchas gracias por tu comentario, Pilar. Sí, no es fácil pero tampoco hay que cambiar drásticamente. Dando pequeños pasos cada día poco a poco podemos mejorar y crecer como persona.
Dorit, me ha encantado tu artículo, además me parece que todo el mundo debería leerlo, es tan importante la actitud como bien dices y cómo te cambia la vida si canalizas bien tus emociones una vez reconocidas. Ahora bien, no es tarea fácil, por lo que muchas gracias por tus sabios consejos.
Muchas gracias por tus palabras, Almudena. Me alegra que te parezcan útiles. Para que todo el mundo lo lea ya sabes, a compartirlo 😉
La actitud lo es todo, muchas veces un problema pequeño se puede convertir en algo grande, dependiendo de la forma en que lo tomemos y según el momento que estemos pasando, no siempre tenemos el mismo estado de ánimo para sobrellevar determinadas situaciones.
Muy buenos consejos das en este post, el aquí y el ahora es algo que todos deberíamos practicar, no dejar para mañana lo que puedes hacer ya.
Gracias por tu comentario, Amparo. Como bien dices dejarse arrastrar por una mala actitud sólo empeorará las cosas y es mejor hacer frente cuanto antes a las cosas.
De acuerdo contigo de la importancia en la actitud delante de las cosas que nos suceden. En la vida he aprendido a modificar ciertas respuestas mías delante de hechos y puedo decir que soy capaz de hablarme con más respeto, de tener pensamientos más productivos y encarados a la búsqueda de soluciones. Así que 100% actitud, sí, nos suceden cosas en la vida y oye, no siempre te sentirás bien, ni mucho menos y debes aceptar también que no estarás siempre arriba, pero una vez detectado cómo te sientes y aceptarlo se debe poner la vista a la pregunta ¿qué puedo hacer?
Muchas gracias por tu comentario, Aida, y enhorabuena por tu buena actitud. Estoy de acuerdo contigo en tomar acción una vez reconocido y aceptado lo que nos pasa.
Dorit yo pienso que la actitud comienza con una estructura de pensamiento, una forma de pensar que nos deja anclados en un pensamiento recurrente, muchas veces toxico y dañino, que hace que tomemos siempre la misma actitud frente a las situaciones de la vida. Es cierto que existe gente con una excelente actitud todo el tiempo, de esas que se ven siempre felices y a veces parece que no se quiebran, y un día recibes la noticia de que esa persona se quebró y resquebrajó en mil pedazos, cuando la creíamos fuerte todo el tiempo, tal vez es porque alguna vez no se permitió la tristeza. Para mí lo más importante es el autoconocimiento, ya que a diario manejamos emociones, sensaciones, sentimientos y estados del ser, que si no tenemos la capacidad de reconocerlos en nosotros y manipulamos a diario con el mismo tipo de pensamiento, la actitud puede llegar a ser una putrefacta enemiga que no te permitirá ser una persona nueva y renovada, así que compañera solo hay que permitirse el ser diferentes y quitarnos la etiqueta de “yo soy así”, sin la intención de cambiar ni de crecer, y teniendo la apertura para aprender a desaprender. Saludos.
Muchas gracias por tus reflexiones, Eliana. Cómo me rechina la frase “es que yo soy así”. Estoy de acuerdo que todos podemos aprender y seguir desarrollándonos si le ponemos voluntad. Cuestión de actitud!
Hola Dorit, excelente artículo! La actitud es muy importante en nuestra vida y lo antes que lo entendemos mejor. Me encantan los pasos que ofreces son muy prácticos. Es fascinante como dos personas en las situaciones parecidas que aceptan la vida de distinta manera pueden vivir la totalmente diferente. Nuestros pensamientos construyen nuestra realidad y necesitamos cuidarles igual como nuestro cuerpo para que podemos vivir una vida mejor. El video súper, gracias por compartir 20 minutos de la risa y reflexiones increíbles. A por ello, a elegir nuestra actitud y disfrutar de la vida. Un abrazo guapa.
Gracias por tu comentario, Elena. Me alegra que los trucos te parezcan prácticos. Y el vídeo es genial ¿verdad?
Dorit un post muy completo y que me ha encantado. Muchas gracias por todos estos trucos, son muy buenos y seguro que ayudan a cambiar de actitud a muchas personas. Creo que más importante que lo que nos pasa es la actitud con la que nos enfrentamos a lo que nos pasa. Todo depende de nuestros pensamientos y creencias y de como reaccionamos de forma automática ante determinadas situaciones. Y todo esto se puede cambiar.
Es básico aceptar la situación y cambiar nuestra actitud para ayudarnos y pasar a ser nuestro mejor amigo. Yo soy una persona muy optimista y perseverante, pero es cierto que he tenido que cambiar muchas cositas para mejorar y cuidarme.
Me encanta la frase: tanto si piensas que puedes como que no puedes, estás en lo cierto. Estoy totalmente de acuerdo con ella
Muchas gracias por tu comentario, Odina. Estoy de acuerdo contigo en que lo decisivo es cómo nos enfrentamos a lo que nos pasa. A mí también me encanta la cita de Henry Ford.
Yo considero que la actitud es nuestra esencia propia, el cómo nos vemos y vemos a los demás. No es nada fácil cultivar en el día a día una actitud equilibrada en nuestras vidas. Me encanta las preguntas que planteas he es utilizado en el coaching y pnl, generalizar se nos hace muy fácil, pero concretar a veces es tan difícil.
Enamorada de este post, soy de aquellos que van en la vida vestida de la actitud positiva.
Saludos.
Muchas gracias por tus palabras, Alexa. ¡Me alegra mucho que te haya gustado tanto!
Lo siento, soy positiva. Tengo mis momento de bajón total, pero no me duran mucho o intento que sean pasajeros. Pero no concibo una vida llena de quejas, lloros y pataletas. ¡No puedo con las actitudes victimistas!
Me gusta mucho tu artículo porque es claro y estructurado. Tratas cada tema y aportas soluciones sencillas pero rotundas a la vez. ¡Muy chulo, Dorit!
Muchas gracias por tu opinión, María José. Me alegra que seas positiva y que te hayan gustado los consejos.
Guapa, yo soy del pensar que todo es cuestión de actitud, la actitud es la que demarca si algo lo vas a vivir bien o mal. Si vas a ser feliz o desdichada, porque a la final todo depende de cómo nos tomemos las experiencias que vivimos. No es fácil tener una actitud positiva y “buena” frente a las cosas que vivimos, pero la verdad es que merece la pena trabajar cada día en ello.
Muy buenos consejos guapa y el vídeo me encanta, es súper motivador 🙂
Gracias por tu comentario, Diana. Nosotros decidimos cómo nos queremos enfrentar a las cosas y, como bien dices, no siempre es fácil hacerlo con buena actitud pero vale la pena intentarlo y trabajar en ello.