[vc_row][vc_column][vc_column_text]Se escribe bastante sobre personas tóxicas y cómo evitarlas. Pero ¿y si todos pudiéramos llegar a ser esa persona tóxica?
Las personas formamos un ecosistema de relaciones. A diario tratamos con familiares, amigos, compañeros de trabajo, conocidos y desconocidos. Nuestro bagaje mental y emocional, educación, experiencias, recuerdos, sistema de valores, carácter y nuestro estado de ánimo actual influyen en nuestro comportamiento. Con tantos factores en juego se pueden producir conflictos y malentendidos.
Pero si los conflictos se producen a menudo, conviene analizar si estamos siendo víctimas de comportamientos tóxicos producidos por otros o por nosotros mismos. Veamos por qué se pueden producir situaciones tóxicas y cómo lidiar con comportamientos tóxicos en el ámbito laboral.
Qué es el comportamiento tóxico
Definiría la toxicidad en el ámbito laboral como el hecho de desequilibrar el ambiente, entorpecer y dificultar las relaciones así como perjudicar el funcionamiento y productividad de la empresa.
Ejemplos de comportamientos tóxicos pueden ser:
- Querer siempre llevar la razón y tener la última palabra.
- Hacer pasar ideas de otros por las propias.
- Acaparar la información porque pensamos que eso nos hace imprescindibles.
- Dejar todo para el último momento y obligar a los que pedimos ayuda que dejen caer todo lo que estén haciendo para sacarnos las castañas del fuego.
- No coordinarse e informar a los implicados adecuadamente.
- Quejarse sobre situaciones pero no proponer soluciones.
- Criticar a otros detrás de sus espaldas o incluso difamarlos (véase acoso laboral).
- Levantar la voz a otros o echarles un rapapolvo como si fueran niños.
- Estar más por allí (tomando café, fumando, de cháchara o lo que sea) que en su puesto de trabajo. Pero después quejarse por sobrecarga de trabajo.
- Invadir el espacio personal de compañeros.
Los #comportamientostóxicos perjudican el #ambientelaboral, las #relaciones y la #productividad Share on X
De qué depende si podemos ser tóxicos
Creo que depende del entorno, de nuestros valores y de cómo nos relacionamos y trabajamos. Si nuestros valores no encajan con la cultura de una empresa podemos parecer una persona difícil o incluso tóxica.
Cuando nos entrevistan para un puesto en una empresa no suele ser fácil saber si realmente vamos a encajar con los superiores y compañeros. Además puede ser que la empresa publicita una cierta cultura y valores que dentro de la empresa no han conseguido hacer realidad. Si entonces seleccionan personal acorde con esos valores anunciados, puede que el candidato choque con la cultura real que reina dentro de la empresa. Entonces bien el candidato podría llegar a parecer tóxico o bien los nuevos compañeros se lo podrían parecer a él.
Pero aunque en general encajemos con la cultura de la empresa y con los compañeros es difícil llevarse bien con todo el mundo. Debido a nuestro bagaje, nuestra forma de ver el mundo, nuestra manera de trabajar y relacionarnos podemos chocar con la forma de ser de otras personas.
También puede que estemos estresados, agobiados o de mal humor y se lo traslademos a las personas con las que tratamos. Es decir que o bien nos comportamos de forma tóxica o bien le transmitimos al otro nuestra energía negativa provocando un reflejo que consideramos una actitud tóxica.
Por todo lo dicho sobre bagaje, valores y carácter, asimismo piensa que una persona que nos parezca tóxica a nosotros, puede no dar esa misma impresión a otras personas. O puede que nosotros creamos que una persona es tóxica y esa persona opine lo mismo de nosotros.
#Bagaje emocional y mental y #estadodeánimo influyen en nuestro #comportamiento. No seas #tóxico Share on X
Cómo neutralizar los comportamientos tóxicos
Veamos cómo defendernos de comportamientos tóxicos que suframos así como evitar ser nosotros esa persona tóxica.
Conócete a ti mismo
¿Has oído alguna vez que lo que nos irrita de otras personas son cualidades que no nos gustan de nosotros mismos? Aunque no sea exactamente el caso, pregúntate por qué te saca de quicio alguna persona o situación. ¿Está atacando un valor personal que consideras sagrado? ¿Te recuerda alguna situación o a alguna persona? ¿Te hace sentir algo que no quieras experimentar?
Conocernos a nosotros mismos nos ayudará a tomar consciencia de la situación, entender por qué nos afecta y detener la espiral de reacción negativa a tiempo. Además recuerda que tú decides cómo te hace sentir algo o alguien. Aprende a no tomarte la situación tan personal y no dejes que te afecte.
Todo lo que nos irrita en otros nos puede llevar a un #entendimiento de nosotros mismos. #CGJung Share on X
Muestra aceptación y comprensión
Entrenar nuestra inteligencia emocional es clave. Además de conocernos a nosotros mismos aprenderemos a comprender las emociones de los demás y ser empáticos.
Acepta que otras personas pueden tener diferentes formas de enfrentarse a la vida. Tienen sus estrategias para relacionarse con los demás y su forma de trabajar que puede no gustarnos. Piensa que detrás de los comportamientos tóxicos se pueden esconder insatisfacciones, frustraciones, miedos e incluso traumas. Puede que la otra persona tenga problemas en casa que desconozcas. O tal vez esté compensando de forma no adecuada ciertas inseguridades. Por ello, intenta no juzgar a otras personas por su comportamiento en cierta situación sino respetarles y comprenderlos.
Agradece la diversidad de opiniones y maneras de hacer. ¿No sería el mundo aburrido si todos fuéramos iguales? De hecho, esa diversidad bien aprovechada puede servir para encontrar ideas y soluciones nuevas, creativas e innovadoras.
Establece límites
Ser comprensivo no significa que debas aceptar los comportamientos tóxicos sin más. Acepta a la persona pero pon límites a los comportamientos inapropiados con asertividad.
No te rebajes al mismo nivel ni entres en la confrontación. Desgastará tu energía y te hará sentir peor. Tampoco eches la culpa o reproches a la persona ya que sólo empeorará la situación. Mejor explícale que no te gusta esa forma de actuar o que te afecta que te hable de esa manera. Si la otra persona no recula o no está abierta a nuevos argumentos, dile amablemente que será mejor continuar la conversación en otro momento.
Asimismo es importante aprender a distinguir entre personas que piden tu ayuda para resolver un problema de los que solamente te quieren utilizar de papelera emocional para descargar sus quejas.
#Acepta a la #persona pero pon #límites a un #comportamientotoxico con #asertividad Share on X
Céntrate en las soluciones
En vez de centrarte en cómo te hace sentir el comportamiento tóxico, frustrarte y estresarte por ello, piensa en cómo resolver la situación en concreto.
Olvídate de generalizaciones del tipo “siempre hace lo mismo” o “nunca cambiará” y enfoca el momento presente. Los conflictos pasados existen en tu memoria y sólo puedes resolverlos con perdón y aceptación. Los posibles conflictos futuros son producto de tu imaginación así que no te estreses por lo que no ha ocurrido.
Céntrate en el aquí y ahora que es el único lugar y momento en el que puedes resolver el problema. ¿Qué ha causado el conflicto actual y cómo puedes resolverlo? ¿Qué puedes hacer ahora mismo para solucionar el problema que haya surgido?
Los #problemas solo se pueden resolver #aquí y #ahora. Neutraliza el #comportamientotoxico Share on X
Busca lo positivo
Piensa que lo que te molesta pueden ser conductas que te parecen irracionales, injustas o egoístas. Pero no te dejes atrapar por pensamientos negativos. Cada persona tiene algo bueno y especial, algo que sabe hacer muy bien. Busca esa parte positiva porque entonces no te irritará ni molestará tanto.
Recuerda que tenemos diferentes formas de actuar así que acepta que otra persona se comporte de forma diferente a cómo tú consideras que es la correcta. Responde con compasión y aceptación a la agresividad y las críticas. Esa actitud te hará sentir mejor y hasta puede que ayude a la otra persona a darse cuenta de su forma de actuar y superar su negatividad.
Cuando alguien te saca de quicio piensa que cada persona tiene algo #positivo Share on X
Toma distancia
Es difícil aceptar a otros y no juzgarlos. Hay ciertos comportamientos que atacan tanto a nuestros valores que nos cuesta no molestarnos, estresarnos o incluso enfadarnos.
Pero tampoco hace falta que intentes convertir a esa persona, que consideras tóxica, en tu mejor amigo. Cuanto más tiempo paséis juntos más se puede incrementar la irritación. Por ello, reduce el trato al mínimo necesario para el trabajo y evita relacionarte más allá.
Por tu #bienestar reduce el contacto con #personastóxicas al mínimo necesario para tu #trabajo Share on X
Resumen
Los comportamientos tóxicos se originan en nuestro bagaje emocional y mental. Aceptar a otras personas y sus carencias nos ayudará a ser más comprensivos y estresarnos menos. El rencor sólo nos introduce en una espiral de negatividad por lo que céntrate en resolver la situación aquí y ahora.
¿Qué comportamientos te resultan tóxicos y por qué te sacan de quicio? ¿Cómo lidias con las situaciones tóxicas? ¿Crees que alguna vez te has comportado como una persona tóxica?
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20 respuestas
Qué interesante el post Dorit, Muchas Felicidades por él!!
Personalmente creo que todos en algún momento somos tóxicos, nuestro bagaje, valores y carácter nos hace ver o percibir las cosas desde nuestra particular visión, por eso es importante conocernos y saber quiénes somos, cuales son nuestros valores y qué tipo de personas queremos que haya en nuestra vida. Pero sobre todo RESPETAR lo que diga y haga la otra persona, la EMPATÍA aquí considero que es fundamental. Si lo que hace la otra persona nos hace sentir mal, valorar si realmente nos compensa esa relación. OJO que esto también lo pueden hacer los demás con nosotros, por eso digo que todos en algún momento somos tóxicos para otras personas. Eso no quiere decir que lo seamos para otras o para nosotros mismos, y que las personas que nosotros consideramos que son tóxicas lo sean para los demás.
¿Qué comportamientos te resultan tóxicos y por qué te sacan de quicio? Intento no perder los nervios, pero sí me saca de “quicio” la falta de respeto hacia los demás, cuando veo a otra persona que piensa que lo que opine o haga el otro no tiene ningún valor y tiene la verdad absoluta. Pero sobre todo cuando intenta humillar a la otra persona para dejarla en evidencia, y demostrar al resto que está por encima y tiene razón y que el otro no …¿ razón en qué, y para qué? cada uno tenemos nuestra forma de pensar, no estamos en una constante competición en busca del primer premio ¿o sí?
¿Cómo lidias con las situaciones tóxicas? Me alejo todo lo que puedo de esa persona, y cuando tengo que tratarla intento ser asertiva.
¿Crees que alguna vez te has comportado como una persona tóxica? Seguro que sí, inconsciente o incluso conscientemente, la vida nos pone en situaciones que muchas veces se escapan a nuestro control, pero para eso está la experiencia para aprender y crecer de ellas, e intentar no volver a repetirlas.
Un fuerte abrazo!!
Hola, Mariví!
¡Muchísimas gracias por tu comentario y por contestar tan honestamente a todas las preguntas. Estoy de acuerdo contigo – de ahí la idea para enfocar este post – de que todos podemos llegar a comportarnos consciente o inconscientemente como personas tóxicas en algún momento. Pero los que trabajamos nuestra inteligencia emocional nos daremos cuenta y prevendremos.
¡Hola, Dorit!
Como siempre, ¡un post genial, completo y muy interesante! 😉
Desde mi punto de vista, las personas no somos tóxicas si no que, quizás, en algún momento nos volvemos inadecuadas para otras personas. Cuando tenemos la sensación de que una persona es tóxica para nuestra vida, seguramente esa persona siente lo mismo hacia nosotros (de hecho un día escribí sobre ello también en mi blog: http://escribiendounabrazo.com/las-personas-no-son-toxicas/) 😉
Como creo que la toxicidad es, en realidad, momento y lugar inadecuado, me gusta mucho que podamos tener opciones y herramientas para gestionar estás situaciones como las que nos propones hoy. La que tengo que trabajar más es la de tomar distancia porque, a veces, me cuesta un montón… Y puede que físicamente consiga hacerlo pero la mente luego le da mil vueltas, jeje. Pero, al final, cuando superamos estas situaciones y aprendemos a gestionarlas, queda lo realmente importante, el amor que sentimos y eso nos permite pasar página y seguir adelante 🙂
¡Gracias de nuevo por este post!
¡Un abrazo grande!
Hola, María! Tendemos a etiquetar a otras personas y es muy fácil llamarlos tóxicos cuando nos centramos en los comportamientos que nos disgustan. De allí, el título del post que pretende llevar a la reflexión. En cuanto a lo que dices de que te cuesta tomar distancia mentalmente, vaya por delante que no estás sola. Nuestra mente tiende a rumiar sobre el pasado y lo que imaginamos que podría pasar en el futuro. El truco es atraer nuestra atención al presente, concentrarte en el aquí y ahora. La situación que te ha sacado de quicio ya ha pasado. ¿Estás resolviendo algo dándole vueltas o en realidad solo te sirve para sentirte angustiada o molesta? Ahora mismo qué te falta para estar en paz y a gusto contigo mismo? Aprender a estar plenamente consciente en el presente nos ayuda a calmar nuestra mente rumiante.
Creo que todos somos tóxicos en algún momento, por mas que queramos ser buenos, no falta el día en que tengamos el mico al hombro y sale a flote todas las frustraciones que tengamos acumuladas y casi siempre paga el que menos que ver con nuestro estado de ánimo.
Dorit me gusta esta perspectiva que planteas sobre no colocar la toxicidad en tercera persona como estamos acostumbrados a hacer, sino de asumirnos en algún momento de nuestras vidas como personas toxicas, siendo los lugares de trabajo espacios propicios para convertirnos en personas toxicas, precisamente por eso de las diferencias que muy bien planteas, y sobre todo si hablamos de un ámbito muy competitivo en donde luchamos por sobresalir. El autoconocimiento es esencial para saber qué tan tóxicos hemos llegado a ser, para comprender que eso que está allá afuera y que tanto me molesta alguien me lo muestra para yo también poderlo ver en mi y trabajarlo y transfórmalo. Como siempre un excelente post que nos hace reflexionar. Saludos.
Gracias Eliana! Creo que es importante que hagamos un ejercicio de mirarnos al espejo para reconocer posibles comportamientos tóxicos y comprender por qué nos molestan ciertos comportamientos de otros.
Ay mientras más leía más pensaba en una compañera de la oficina jajajajaja
lo bueno que poco a poco lo llevamos mejor!
¿Qué comportamientos te resultan tóxicos y por qué te sacan de quicio?
que nos recuerden constantemente la antigüedad que ciertos empleados tienen, como si por eso fueran mejores
¿Cómo lidias con las situaciones tóxicas?
siendo bien sincera, mi superior es tóxico, y lo que hago es darle la razón, conformista tal vez, pero eso evita problemas y discusiones, tengo otra compañera que hasta me duele la cabeza y sinceramente la ignoro todo lo que puedo
¿Crees que alguna vez te has comportado como una persona tóxica? claro! no digo que sea consiente pero si, en algun momento lo he sido, más que nada porque a veces soy muy cabezota y seguro fastidié a más de uno.
un beso!
Hola, Eliza. Como es difícil ignorar a compañeros o al jefe que tienes que ver todos los días, piensa qué es lo que te saca tanto de quicio y por qué y busca las cosas positivas que seguramente tienen, aunque cueste verlas. Te ayudará a no verlos solo como personas tóxicas.
Muy buen post Dorit y los consejos. Me parece muy importante autoconocerse. Los valores y creencias es una base desde donde salen las limitaciones y algunos que no les conoces se limiten vivir muchas veces culpando a los demás. Si, creo que todos en algún momento de nuestra vida hemos tenido comportamiento toxico, yo misma también.
Cuando lo puedes reconocer ese el primer paso. Desarrollar la asertividad es punto muy importante para mejorar. Muchas gracias guapa. Un abrazo
Gracias por tu comentario, Elena. Desde luego el autoconocimiento y la asertividad son claves.
Debí aceptar que solía ser una persona tóxica y varios comportamientos míos eran negativos. Afortunadamente creo que he madurado y tengo una nueva perspectiva de la vida que le ha ayudado a cambiar mi actitud, la verdad estoy muy feliz con quién soy ahora 🙂
Me alegra mucho que te sientas bien contigo misma ahora.
Todos tenemos algo de tóxicos en alguna área de nuestra vida, es inevitable, por más trabajados que estemos algo a la final termina por estallar y de alguna manera la frustración sale a flote, la gran pregunta es ¿Lo reconoces? ¿Cuándo lo haces puedes evitarlo, o mejor lo dejas salir y luego asumes las consecuencias? porque al fin y al cabo liberarlo también es una forma de liberarte tú de una carga.
En fin, ser tóxico no es malo, todos necesitamos ese espejo, el asunto es cuando vives una vida tóxica, cuando lo llevas al extremo de: todo tu mundo gira en ser tóxico.
A mi me parece un comportamiento tóxico la falta de comunicación o la manipulación a la que se puede llegar por ella. También los reclamos me parecen tóxicos, sobre todo porque la mayoría son simples carencias que tú mismo tienes. Pero sobre todo te diré que me parece tóxico que uno mismo se deje sabotear por otra persona cuando el problema es de ella. Algo que inevitablemente cuesta mucho separar y todos terminamos involucrándonos porque hay cosas que inevitablemente nos afectan y somos humanos, queremos ayudar, queremos a nuestra familia y como tal nos vemos involucrados en sus situaciones muchas veces :/
Sin embargo, una cosa es clara para mí. Ser tóxico es manejable si te conoces, te aceptas y sobre todo te comprendes. Si no lo reconoces, estás pecando de tóxico y eso ya no es del todo sano :O
Muchas gracias por tu comentario, Diana. Creo que hay un trecho entre que te salga el genio alguna vez o tener alguna flaqueza que pueda molestar a otros y ser tóxico. El comportamiento tóxico lo deberíamos reconocer y controlar para no hacer daño a otros de forma gratuita. La inteligencia emocional y la asertividad nos ayudan con ello.
Un artículo muy interesante sobre las personas tóxicas. Cuando te encuentras con una en el trabajo debe ser muy difícil de lidiar con ella (a mi nunca me ha pasado pero me lo imagino).
Lo mejor que se puede hacer con una persona tóxica es alejarte tanto como puedas de ella, pero en el trabajo no siempre será posible o sea que tendrás que aprender a mantener las distancias y hablar de forma sertiva con esa persona.
Me gusta la frase de Carl Jung y pienso que es bueno analizar que es lo que esa persona te está mostrando y ver si puedes aprender y crecer gracias a esa situación.
Gracias Odina. Efectivamente no siempre podemos evitar las personas que nos parecen tóxicas. Entonces nos viene bien aplicarnos la frase de Carl Gustav Jung y analizar por qué nos molesta tanto así como intentar no solo etiquetar esa perdona como tóxica sino también buscar sus puntos positivos.
Pues una buena reflexión, es verdad que siempre hablamos y pensamos sobre aquellas personas de nuestro alrededor que son tóxicas, pero es cierto que igual los tóxicos somos nosotros! aunque de los ejemplos que nos dejas sobre el comportamiento tóxico no cumplo ninguno… a pesar de ello, tomaré muy en cuenta tus consejos, más que para no ser tóxico para mejorar como persona… que en realidad acaba siendo lo mismo!
Gracias por tu comentario, Resi. Me alegra que no sueles comportarte como en los ejemplos pero que aún así tendrás en cuenta los consejos.
Creo que en determinado momentos todos podemos llegar a ser tóxicos por eso la importancia de conocernos a nosotros mismos y conocer las características de la gente tóxica para no caer en sus comportamientos. Excelente artículo!